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Reflexion 14.06.2023

Pensar el encuentro mientras lo haces

A finales de mayo organizamos el primer encuentro europeo de ‘Arte como espacio de encuentro’ y la Ruta Comunal en Galicia.



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A finales de mayo organizamos desde Concomitentes el encuentro europeo ‘Arte como espacio de encuentro’ y la Ruta Comunal en Santiago de Compostela y en el monte vecinal de Couso (Gondomar, Pontevedra). Con estas sesiones públicas queríamos comprender cómo las comunidades pueden co-crear juntas y, cómo, para eso, es preciso encontrarse. Las sesiones debían pivotar sobre el concepto “encuentro”, sin ser un ejercicio abstracto, para lo que pensamos en el encuentro mientras lo celebramos juntas.

De todos es sabido de la capacidad de hacer juntas, más cómo podemos contribuir a intensificarlo o cómo puede el arte ayudar a que las comunidades se junten para imaginar nuevos procesos, productos o gestionar en mano común un monte, una obra de arte o un legado patrimonial. A lo largo del 2023 y 2024, en el marco del proyecto europeo ‘Art Living Lab for Sustainability’, que fue quien financió esta actividad, vamos a desarrollar tres proyectos participativos con los que ayudar a incrementar la consciencia de la capacidad de las comunidades de autogestionar su territorio, de reconectarse con su territorio inmediato. El primer paso para esto es encontrarse. Saber lo que unos precisan, lo que los otros desean, o lo que está en juego, un encuentro que es una escucha profunda. Y aquí el arte ayuda a poner el cuerpo, a incrementar las sensibilidades y a despertar otros modos de acercarnos a la realidad, que en muchas ocasiones, habían quedado silenciadas. 

El proyecto europeo ‘Art Living Lab for Sustainability’ está financiado por la Comisión Europea a través de Europa Creativa y es liderado por Concomitentes, junto a los socios   de Nieuwe Opdrachtgevers, la Societé de Nouveaux Commanditaires y la Universidad de Santiago de Compostela.

La mediadora del proyecto europeo en Galicia, Natalia Balseiro, explica su proceso de mediación. © Andreia Iglesias
La mediadora del proyecto europeo en Galicia, Natalia Balseiro, explica su proceso de mediación. © Andreia Iglesias

En Santiago, encuentro cultural europeo

En la jornada del 25 de mayo en la Zona C de Santiago de Compostela, se inició una conversación abierta con la artista del proyecto de Concomitentes, Legado Cuidado, Carme Nogueira; Valérie Cudel, mediadora del proyecto europeo ‘Water Commons’ en Francia e integrante de La Société des Nouveaux Commanditaires; Thérèse Legierse, curator de arte y coordinadora de De Nieuwe Opdrachtgevers en Bélgica; y Fran Quiroga, investigador transdisciplinar y coordinador de Concomitentes. Las personas relatoras profundizaron sobre el poder del arte para generar lugares de encuentro que faciliten la agencia ciudadana, subrayando el impacto más allá de la producción de una obra artística. 

Y es que, muchas prácticas artísticas son incursiones que pretenden desentrañar lo que ocurre en un territorio, develar injusticias contemporáneas o contribuir a que las comunidades puedan leer sus procesos. El arte juega así un papel fundamental en la producción de esta subjetividad individual y colectiva, contribuyendo a crear otras formas de ver y sentir el mundo, consiguiendo un papel relevante, pero infravalorado, de experimentación de metodologías, protocolos, otras formas de hacer y decisiones comunes.

Considerando lo sensible como encuentro de lo múltiple, en este intercambio ‘Arte como espacio de encuentro’, se concluyó en los procesos de institución ciudadana, la imaginación política también es arte. Esta experiencia sensorial, para ser realmente útil, debe ir acompañada de un marco ético de compromiso que la enmarque y de un compromiso político que amplíe el alcance de una intervención artística.

En definitiva, se generó un taller, hilado desde la conversación de estas voces, que fue  más allá del proyecto europeo, aprendiendo y debatiendo juntas desde la propia práctica.

Ruta comunal: Exploración del territorio de ‘Tierra común’

En la ruta comunal por los Montes de Couso confluimos unas sesenta personas de diferentes países, territorios, experiencias y bagajes. Vecinas y vecinos del entorno local, artistas, mediadoras, académicos y otras personas que trabajan en el ámbito del arte, la cultura y el patrimonio, que convivieron con las comuneras y comuneros de Couso. Un espacio muy enriquecedor para el cuerpo y el espíritu por su transversalidad a la hora de abordar los conflictos sociales de los lugares y el desarrollo de los territorios. Además, se posicionó al arte, la mediación y la propia creación artística como herramienta de transformación e innovación social con las comunidades; a los montes comunales como potencia jurídica y organizativa del pasado, el presente y el futuro, y a las metodologías de acompañamiento y seguimiento de proyectos como éste por parte del campo de la academia.

El viernes 26 de mayo visitamos los Montes Vecinales de Couso de la mano del presidente de la Comunidad de Montes, Xosé Arauxo, quien hizo un paseo guiado y comentado alrededor de los principales proyectos que están desarrollando desde la comunidad de montes. Pudimos visitar, acompañados de una hermosísima tromba de agua que nos dejó a todas empapadas, el bosque comestible situado en la zona alta del monte, una de las piezas que representan la diversidad y multifuncionalidad de este territorio, y nos asomamos al refugio de anfibios para las crianzas, aunque ya no pudimos verlo de cerca, porque arrancó la tormenta. 

El coordinador de Concomitentes, Fran Quiroga, durante su intervención. © Andreia Iglesias
El coordinador de Concomitentes, Fran Quiroga, durante su intervención. © Andreia Iglesias

Continuamos la actividad en la Casa Vecinal de Couso, un recurso para la comunidad impulsado y hecho por los propios comuneros y comuneras. Una vez allí, David Soto, profesor de la Universidad de Santiago de Compostela, compartió con las personas asistentes su conocimiento sobre los montes comunales y su valor como manera de gestión de la tierra, del territorio y de cohesión y emancipación social. Una herramienta potentísima para este futuro incierto que tenemos por delante como sociedad y para la que la herramienta jurídica de los montes comunales puede suponer una solución innovadora para la gestión del territorio, la prevención de incendios, la autosuficiencia alimentaria y la generación de empleos locales de calidad y la protección de la biodiversidad. 

Por otra parte, Benito Burgos, coordinador del programa Cultura y Ruralidades y Subdirector General de Cooperación Cultural con las Comunidades Autónomas del Ministerio de Cultura y Deporte, presentó los diferentes programas impulsados desde el Ministerio para la diversificación e implementación de la producción cultural en los territorios rurales de todo el estado español. Una herramienta que permite implementar proyectos arraigados a los diferentes territorios rurales de carácter cultural, artístico y patrimonial, proyectos ubicados y conectados con las comunidades locales. 

Para finalizar Natalia Balseiro, la mediadora del proyecto europeo en España, ‘Tierra Común’, desarrollado en Montes de Couso, compartió algunas pinceladas del proceso de mediación que se está desarrollando desde el mes de marzo en el marco de este proyecto, así como los diferentes procesos de pensamiento y práctica que se están desarrollando con la comunidad de montes y vecinas y vecinos de Couso para imaginar juntas un deseo común. Se habló de cómo, en un proceso de mediación como éste, hay que despojarse del deseo individual para hablar de las necesidad que tiene la comunidad de montes, el vecindario, el territorio, entre otros. Y, a partir de ahí, imaginar soluciones, problemas o dilemas que nos permitan avanzar, a través de una obra de arte o de una intervención artística, en el territorio. 

No podía faltar la comida, la fiesta y la performance en un encuentro de arte, así pudimos disfrutar en la Casa Vecinal de Couso, una performance performance de Petra Porter, quien nos llevó al deseo, una herramienta que mueve mundos y cuerpos, y finalizamos, como no podía ser de otro modo, con el movimiento de nuestro cuerpos gracias a la Charanga Va de Baile.

A finais de maio organizamos dende Concomitentes o Encontro Europeo de Arte como espazo de encontro e o Roteiro Comunal en Santiago de Compostela e no monte veciñal en man común de Couso (Gondomar, Pontevedra). Con estas sesións públicas queríamos comprender como as comunidades poden co-crear xuntas e de como para iso é preciso encontrarse. As sesións debían pivotar sobre o concepto “encontro”, mais non podia ser un exercizo abstracto, había que facelo, precisábamos pensar o encontro mentres o facíamos.

De todos é sabido da capacidade de facer xuntas, mais a cuestión é como podemos contribuir a intensificar isto, ou pode a arte axudar a que as comunidades se xunten para imaxinar novos procesos, productos ou xestionar en man común un monte, unha obra de arte ou un legado patrimonial. Ao longo do 2023 e 2024 no marco do proxecto europeo ”Art Living Lab for Sustainability”, que foi quen financiou esta actividade, imos desenvolver tres proxectos participativos cos que axudar a incrementar a consciencia da capacidade das comunidades de autoxestionar o seu territorio, de reconectarse co seu territorio inmediato. Para iso, o primeiro paso é encontrarse. Saber o que uns precisan, o que os outros desexan, ou o que está en xogo, un encontro que é unha escoita profunda. E aquí a arte axuda a poñer o corpo, a incrementar as sensibilidades e a despertar outros modos de achegarnos a realidade, que en moitas ocasións, ficaran silenciadas. 

A actividade enmárcase dentro do proxecto europeo 'Art Living Lab for Sustainability', financiado pola Comisión Europea a través de Europa Creativa e é liderado por Concomitentes, coa compañía, como socios,  de Nieuwe Opdrachtgevers, La societé de Nouveaux Commanditaires e a Universidade de Santiago de Compostela.

A mediadora do proxecto europeo en Galicia, Natalia Balseiro, explica o seu proceso de mediación. © Andreia Iglesias
A mediadora do proxecto europeo en Galicia, Natalia Balseiro, explica o seu proceso de mediación. © Andreia Iglesias

En Santiago, encontro cultural europeo

Na xornada do 25 de maio na Zona C de Santiago de Compostela, iniciouse unha conversación aberta coa artista do proxecto de Concomitentes, Legado Coidado, Carme Nogueira; Valérie Cudel, mediadora do proxecto europeo ‘Water Commons’ en Francia e integrante da Société deas Nouveaux Commanditaires; Thérèse Legierse, curator de arte e coordinadora de De Nieuwe Opdrachtgevers en Bélxica; e Fran Quiroga, investigador transdisciplinar e coordinador de Concomitentes. As persoas relatoras profundaron sobre o poder da arte para xerar lugares de encontro que faciliten a axencia cidadá, subliñando o impacto máis aló da produción dunha obra artística. 

E é que, moitas prácticas artísticas son incursións que pretenden desentrañar o que ocorre nun territorio, develar inxustizas contemporáneas ou contribuír a que as comunidades poidan ler os seus procesos. A arte xoga así un papel fundamental na produción desta subxectividade individual e colectiva, contribuíndo a crear outras formas de ver e sentir o mundo, conseguindo un papel relevante, pero infravalorado, de experimentación de metodoloxías, protocolos, outras formas de facer e decisións comúns.

Considerando o sensible como encontro do múltiple, en leste intercambio ‘Arte como espazo de encontro’, concluíuse nos procesos de institución cidadá, a imaxinación política tamén é arte. Esta experiencia sensorial, para ser realmente útil, debe ir acompañada dun marco ético de compromiso que a enmarque e dun compromiso político que amplíe o alcance dunha intervención artística.

En definitiva, xerouse un taller, fiado desde a conversación destas voces, que foi  máis aló do proxecto europeo, aprendendo e debatendo xuntas desde a propia práctica.

Roteiro comunal: Exploración do territorio de ‘Terra común’

No encontro confluimos unhas sesenta persoas de diferentes países, territorios, experiencias e saberes; veciñas e veciños de Couso, artistas, mediadoras, académicos e outras persoas que traballan no eido da arte, a cultura e o patrimonio xunto coas comuneiras e comuneiros de Couso.

Un espazo tremendamente enriquecedor para o corpo e o espíritu pola súa transversalidade á hora de abordar os conflitos sociais dos lugares, o desenvolvimento dos territorios, a arte como ferramenta de transformación e innovación social, os procesos de mediación coa veciñanza e os procesos de co creación artística coas comunidades, os Montes Comunais como potencia xurídica e organizativa do pasado, o presente e o futuro e as metodoloxías de acompañamento e seguemento de proxectos como este por parte do campo da academia. 

O venres 26 de maio visitamos os Montes Veciñais de Couso da man do presidente da Comunidade de Montes Xosé Arauxo quen fixo un paseo guiado e comentado ao redor dos principais proxectos que están desenvolvendo dende a comunidade de Montes. Puidemos visitar, acompañados dunha fermosísima tromba de auga que nos deixou a todas empapadas, o bosque comestible situado na zona alta do monte, unha das pezas que representan a diversidade e multifuncionalidade dos Montes de Couso, asomámonos ao refuxio de anfibios para as crianzas ao que xa non puidemos baixar por mor da choiva e a tormenta. 

O coordinador de Concomitentes, Fran Quiroga, durante a súa intervención. © Andreia Iglesias
O coordinador de Concomitentes, Fran Quiroga, durante a súa intervención. © Andreia Iglesias

Continuamos na Casa Veciñal de Couso, un recurso para a comunidade impulsado e feito polos propios comuneiros e comuneiras de Couso, con David Soto, profesor da Universidade de Santiago de Compostela,  quen compartiu coas persoas asistentes os seus saberes sobre os Montes Comunais e o seu valor como xeito de xestión da terra, do territorio e de cohesión e emancipación social. Unha ferramenta potentísima para este futuro incerto que temos por diante como sociedade e para a que, a ferramenta xurídica dos montes comunais, pode supor unha solución innovadora para a xestión do territorio común, a prevención de incendios, a autosuficiencia alimentaria e a xeración de empregos locais de calidade e a protección da biodiversidade. 

Por outra banda Benito Burgos, coordinador do programa Cultura e Ruralidades s Subdirector Xeral de Cooperación Cultural coas Comunidades Autónomas do Ministerio de Cultura e Deporte, presentou diferentes programas que, dende o Ministerio de Cultura, se están impulsando para a diversificación e implementación da producción cultural nos territorios rurais de todo o estado español, unha ferramenta que permitiu implementar proxectos arraigados aos diferentes territorios rurais de carácter cultural, artístico e patrimonial, proxectos situados e conectados coas comunidades locais. 

Para rematar Natalia Balseiro, mediadora do proxecto 'Terra Común' que estamos a desenvolver nos Montes de Couso, compartiu o proceso de mediación que se está a desenvolver en Couso dende o mes de marzo, no marco de este proxecto, así como os diferentes procesos de pensamento e práctica que se están a desenvolver coa comunidade de montes e veciñas e veciños de Couso para poder ir imaxinando xuntas, un desexo común para Couso. Falouse de como, nun proceso de mediación como este, hai que despoxarse do gusto, para falar das necesidades que ten a comunidade de montes, a veciñanza, o territorio etc. e, a partir de ahí, imaxinar solucións, problemas ou dilemas que nos permitan avanzar, a través dunha obra de arte ou dunha intervención artística, no territorio. 

Non podía faltar a comida, a festa e a performance nun encontro de arte, así puidemos coñecer, na Casa Veciñal de Couso, a performance de Petra Porter, quen nos levou ao desexo, unha ferramenta que move mundos e corpos, e rematamos, como non podia ser doutro xeito, co movemento dos noso corpos grazas á charanga Vai de Baile.