×
Compartir
Entrevista 20.07.2021

“Me interesan las herramientas del arte que ayudan a desvelar deseos colectivos”

Entrevista al mediador de nuestra concomitancia gallega, Fran Quiroga.



Versión en gallego

Fran Quiroga es el mediador de Legado Cuidado, nuestra concomitancia ubicada en Betanzos (A Coruña). Definido a sí mismo como investigador interdisciplinar y atravesado en su hacer por el activismo, el arte y los procesos participativos, nos comparte en esta entrevista cómo ha sido y está siendo poner a disposición del proyecto todos los recursos acumulados a lo largo de su trayectoria, en este año clave 2021 en el que se concretará la selección del artista del proyecto tras la definición del encargo.

¿Qué es para ti la gestión cultural? 

¡Y cómo se responde a esto! Lo que me mueve a la hora de hacer o pensar la gestión cultural es qué podemos hacer en comunidad, juntas y juntos. En ese sentido, la cultura es esa capacidad de generación de imaginarios compartidos. Siempre existe una tensión con el término ‘gestión’, hablando más bien de práctica cultural o de mediación, de cómo facilitas, propicias, impulsas o sirves de palanca para responder o problematizar anhelos o deseos. 

En ese sentido, hablamos de una especie de conector.

Hablamos de esa idea de cruce, de camino, en ese punto de fricción se desvelan procesos que, de otra manera, si fueran más unilaterales, no saldrían. Creo que hay una potencia en esa especie de serendipia, aunque también, a su vez, eso genera tensiones, por no saber a priori a dónde te puede llevar. Por eso es importante tener  marcos claros, tanto a nivel temporal como presupuestario. Son espacios generativos en los que la ciudadanía ha de tener claro el espacio de posibilidad que hay.

¿Qué habilidades hay que desarrollar para esta tarea?

Se deben construir espacios generativos, asumir que no tienes el control de todo y que el fracaso está presente. Siempre hay momentos de angustia, de hacia dónde va este proceso, y en muchas ocasiones puede parecer que el proyecto se cae o se rompe, la clave es cómo atendemos y damos respuesta a esos momentos críticos.

Fran Quiroga en uno de los eventos con sus comitentes en Betanzos.

¿Cómo ha sido este proceso participativo creado para Legado Cuidado?

Cuando empezamos el proyecto una idea que sobrevolaba era por qué no se gastaba el presupuesto de la intervención artística en la rehabilitación del parque. Teniendo en cuenta que estaba y está cerrado, esa era la urgencia. En el proceso participativo también surgían otras voces, -no mayoritarias-, que decían que a lo mejor no tenía sentido gastar más dinero en la rehabilitación. Sin embargo, Concomitentes es una asociación soportada por una fundación que trabaja dentro del marco del arte contemporáneo, no podíamos suplir la ausencia de una administración pública ante una dejación de sus funciones. 

Parece un aspecto recurrente en el ámbito artístico…

Es una crítica común, siempre se dan tensiones al hablar desde un ámbito más subjetivo, cuando las necesidades materiales no están cubiertas. 

Pero la selección del artista puede aliarse con ese mismo objetivo.

Por supuesto, lo que se ha hecho ha sido activar un proceso partiendo de la metodología de investigación-acción-participativa  (IAP)  para que el grupo de comitentes se ampliara al conjunto de vecinos y vecinas de la comarca. Eso lo complejiza, porque no se trata de una acumulación de deseos o que gane el mayoritario, sino que la cuestión radica en cómo se va problematizando ese encargo, ahondando más allá de lo aparente, profundizando en esas  tensiones, frustraciones y deseos sobre la relación de la ciudadanía con ese elemento patrimonial, en nuestro caso, el parque del Pasatiempo. 

Ahí entra también tu propia capacidad mediadora.

El mediador no es una persona sin alma, cuerpo o voz, tiene también su propia mochila, pero hay que velar por que no seamos nosotros, los mediadores, los que condicionemos los procesos. Legado Cuidado es una  constante negociación, dentro de los marcos del arte contemporáneo.  

¿Cómo explicarías tu labor en este proyecto?

Me interesa mucho la concepción del arte desde ese lugar interdependiente, ese arte heterónomo del que hablan desde La Fundicio (aquí), un arte que se relaciona y no está desconectado de la vida. De ahí la potencia de aprovechar esas herramientas, dispositivos y metodologías que nos trae el arte contemporáneo para desvelar estos deseos colectivos. Por tanto, el proceso no se reduce a  que el culmen sea una obra de arte, sino que se ha de superar la fetichización del objeto y centrarnos en la producción de agencia comunitaria.

"Así, en Legado Cuidado el proceso arranca a raíz de la caída de esa escultura del estanque del parque y de la propia demanda ciudadana que da respuesta a esta situación. Desde Concomitentes atendemos ese conflicto y acompañamos a la ciudadanía con los recursos y tiempos que tenemos"
Fran Quiroga, mediador de Legado Cuidado

¿Cómo atendéis este conflicto?

No significa que seamos solucionistas, ahí está la cuestión de los límites. Me interesa cómo proponemos espacios de enunciación, sin ser portavoces de nada, eso es arrogante, estamos facilitando ese espacio para que todo aquel que se sienta apelado pueda participar. Por otro lado, es clave cómo establecemos un espacio dialogado desde el que se pueda enunciar ese deseo.

¿Desde qué conclusiones trabajará el artista? 

Surgen tres líneas o fugas en torno a las que tendría que articularse la propuesta: la idea del patrimonio como un común, el ocio como forma de aprendizaje y la ecología de los saberes. Al mismo tiempo, pensamos en cómo esta intervención puede contribuir al cuidado del parque, atendiendo al legado y a la corresponsabilidad de atenderlo. Respecto a la figura del artista, tiene que ser alguien preparado para atender esta demanda que es compleja, también que sea alguien reconocido y que en la producción pueda colaborar con alguien del contexto local y se genere un cruce.  

Fran Quiroga trabajando en la definición del encargo con una comitente.

¿Cómo lidiar entre las expectativas de los comitentes y preservar la libertad creadora del artista?

Quizá hay que vivir con la frustración del deseo, no siempre podemos conseguir lo que anhelamos, aunque caminemos hacia ahí. La propuesta artística no puede ni debe estar tan edulcorada como para contentar a todos y todas. 

¿En qué estado está hoy este proceso?

Va lento, pero caminando de forma sólida. El objetivo es que de aquí a septiembre tengamos al artista seleccionado y avanzadas las negociaciones para poder ver un anteproyecto de obra, para ahí analizar las necesidades y conseguir mayor financiación si fuera necesario. Además hay que continuar afianzando los compromisos con las administraciones local y autonómica, pensando en empezar con la producción en el último trimestre del año o finales de diciembre. Esperamos que el proyecto termine el año que viene.

Versión al gallego

Interésanme as ferramentas da arte que axudan a desvelar desexos colectivos”

Fran Quiroga é o mediador de Legado Coidado, a nosa concomitancia situada en Betanzos (A Coruña). Definido como investigador interdisciplinar e atravesado no seu traballo polo activismo, a arte e os procesos participativos, comparte connosco nesta entrevista como foi e se está a poñer a disposición do proxecto todos os recursos acumulados ao longo da súa traxectoria, neste  ano clave 2021 no que se especificará a selección do artista do proxecto despois da definición do encargo.

Que é para ti a xestión cultural? 

E como se responde a isto! O que me move á hora de facer  xestión cultural é pensar que podemos facer en comunidade, xuntos e xuntos. Nese sentido, a cultura é esa capacidade para xerar imaxinarios compartidos. Sempre hai un pouco de tensión co termo "xestión", falando máis da práctica cultural ou, nesa idea de mediación, de como facilita, propicia, promove ou serve como panca para responder ou problematizar un desexo. Aínda que o noso papel pode estar máis en como espertar ese desexo.

Nese sentido, estamos a falar dunha especie de conector.

Falamos desta idea de cruce, de camiño. Nese punto de fricción revélanse procesos que, doutro xeito, se fosen máis unilaterais, non sairían. Coido que hai unha potencia neste tipo de serendipia, aínda que tamén xera tensión, por non saber a priori a onde te pode levar. Por eso é importante ter marcos claros, tanto a nivel temporal como orzamentario. Son espazos xenerativos nos que a cidadanía debe ter claro o espazo de posibilidade que hai. 

Que habilidades hai que desenvolver para esta tarefa?

Ten que construirse espazos xenerativos, asumir que non tes o control sobre todo e que o fracaso está presente. Sempre hai momentos de angustia, cara onde vai este proceso e, en moitos casos, pode parecer que o proxecto cae ou racha, a chave é como atendemos e damos resposta a eses momentos críticos.

Como foi este proceso participativo para Legado Coidado?

Cando iniciamos o proxecto, unha idea que planeaba era:  por que non se gastaba o orzamento para a intervención artística na rehabilitación do parque. Tendo en conta que estaba e está pechado, esa era a urxencia. No proceso participativo, tamén xurdiron outras voces, non maioritarias, que dicían que non tiña sentido gastar máis cartos na rehabilitación do parque. Porén, Concomitentes é unha asociación apoiada por unha fundación que traballa no marco da arte contemporánea; non debemos asumir a ausencia dunha administración pública ante o abandono das súas funcións.

Parece un aspecto recorrente no campo artístico...

É unha crítica habitual, sempre hai tensións cando se fala dende un ámbito máis subxectivo, cando non se cubren as necesidades materiais.

Pero esta selección do artista pode aliarse con ese mesmo obxectivo.

Por suposto, o que se fixo foi activar un proceso baseado na metodoloxía de investigación-acción-participativa (IAP) para que o grupo de comitentes se ampliase ao conxunto de veciñas e veciños da comarca. Isto faino máis complexo, porque non se trata dunha acumulación de desexos nin de que a maioría gañe, senón que a cuestión reside en como se vai problematizando ese desexo, afondando máis alá do aparente, aprofundando nesas tensións, frustracións e desexos sobre a relación da cidadanía con ese elemento patrimonial, no noso caso, o parque do Pasatempo.

É aí onde entra a túa propia capacidade mediadora. 

O mediador non é unha persoa sen alma, corpo ou voz, tamén ten a súa propia mochila, mais debemos asegurarnos de que nós, os mediadores, non somos os que condicionamos os procesos. Legado Coidado é unha negociación constante, no marco da arte contemporánea.

Como explicaría o seu traballo neste proxecto?

Interésame moito a concepción da arte dende ese lugar interdependente, esa arte heterónoma da que falan desde La Fundicio (aquí), unha arte que está relacionada e non está desconectada da vida. De aí o poder de aproveitar esas ferramentas, dispositivos e metodoloxías que a arte contemporánea nos trae para revelar estes desexos colectivos. Polo tanto, o proceso non se reduce a que a culminación sexa unha obra de arte, senón que hai que superar a fetichización do obxecto e centrarse na produción de axencia comunitaria. 

En Legado Coidado o proceso comeza como consecuencia da caída desa escultura no estanque do parque e da resposta cidadá ante esta situación. Dende Concomitentes atendemos este conflito e acompañamos á cidadanía cos recursos e os tempos que temos.

Como atendedes este conflito?

Non significa que sexamos solucionistas, está a cuestión dos límites. Interésame en como propoñemos espazos para a enunciación, sen ser portavoces de nada, iso é arrogante. Estamos facilitando ese espazo para que todos os que se sintan apelados poidan participar. Por outra banda, é clave está en como establecer un espazo de diálogo desde o que se poida enunciar ese desexo.

A partir de que conclusións traballará o artista?

Xorden tres liñas ou fugas arredor das que habería que articular a proposta: a idea do patrimonio como un común, o lecer como xeito de aprendizaxe e a ecoloxía dos saberes. Ao mesmo tempo, pensamos en como esta intervención pode contribuír ao coidado do parque, atendendo ao legado e á corresponsabilidade de atendelo. En canto á figura do artista, ten que ser alguén preparado para atender esta demanda, que é complexa, tamén alguén recoñecido e que na produción poida colaborar con alguén do contexto local e xerar cruces.

Como xestionar as expectativas dos comitentes e preservar a liberdade creativa do artista?

Quizais teñamos que vivir coa frustración do desexo, non sempre podemos conseguir o que queremos, aínda que camiñemos cara iso. A proposta artística non pode nin debe ser tan edulcorada como para satisfacer a todos.

En que estado se atopa hoxe este proceso?

Vai lento, pero camiña con solidez. O obxectivo é que de aquí a setembro teñamos ao artista seleccionado e as negociacións estean tan avanzadas como para poder ver un anteproxecto da obra, analizar as necesidades e obter máis financiamento se fose necesario. Ademais, cómpre seguir reforzando os compromisos coas administracións locais e autonómicas, pensando en iniciar a produción no último trimestre do ano ou a finais de decembro. Agardamos que o proxecto remate o ano que vén.